El camión queda a nombre de la entidad que financia el equipo.
Los pagos mensuales son abonados en forma de cuotas de arrendamiento durante el plazo que fue acordado previamente.
Una vez pagada la última cuota en el plazo acordado, el cliente puede decidir si comprar el camión, para lo cual puede optar al pago de la opción de compra, una cuota más.
Dentro del financiamiento podemos incluir el seguro asociado al equipo financiado. El mantenimiento, revisiones técnicas y permiso de circulación son responsabilidad del cliente.